En rueda de prensa este martes, Munt ha explicado que se trata de una obra escrita por Brian Friel, considerado el Antón Chéjov irlandés, que «muestra como todas las relaciones son imperfectas y vulnerables», y que tenía muchas ganas de estrenar porque la consoló mucho durante momentos difíciles.
«Es una obra de una gran inteligencia y lucidez, que es la culminación de un escritor a quien no se ha homenajeado suficiente», ha apuntado, y ha explicado que cuando la leyó se le quedó grabada en la piel.
También ha detallado que narra la historia de un matrimonio de escritores irlandeses, interpretados por Selvas y Vilarasau, que esperan la respuesta de un agente literario que debe calificar un archivo, y que su respuesta les puede cambiar la vida y solucionar su precaria situación vital.
Sin embargo, ha explicado que esta respuesta nunca llega y que su expectación genera toda una serie de relaciones humanas, que denotan las imperfecciones y la vulnerabilidad de los vínculos sociales.
«Una obra de la espera»
Vilarasau ha definido el montaje como «una obra de la espera, como aquél que espera a Godot», y con personajes que poseen ilusiones que no se cumplen y que experimentan una profunda soledad.
«El gran acierto de Munt ha sido profundizar en la psicología de los personajes», ha añadido, y se ha mostrado muy satisfecha de poder compartir la obra con la dramaturga, de quien sabía que tenía muchas ganas de representarla.
En esta misma línea se ha manifestado Selvas, que considera que «Friel reiventó el universo de Chéjov y lo llevó a la actualidad», además de remarcar que el montaje también contiene mucha ironía.
Aparte de Vilarasau y Selvas, el elenco de intérpretes está formado por Carme Fortuny, Ferran Rañé, Àlex Casanovas, Àngels Gonyalons y Eduard Buch.
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