Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
  • Inicio
    • Belen Rueda 7
      Imagen de un momento del show
      Silvia Acosta en una escena de 'La dama duende'
      Faun(e) by David Dawson
    • María Fernanda D'Ocón
      Imagen de la actriz dando la bienvenida al público con su mítico "Gracias por venir" en la revista El último tranvía
      Momento del ensayo de 'Remanso' con Nacho Duato
      Diversas mujeres - Compañía Vertebradas Artes Escénicas
    • Últimas noticias

      Michael Ferreri
      Imagen de escena de 'Afanador'
      Imagen promocional de la obra
      Fotografía de escena

      Lo más visto

      Emma Ozores en una escena de la obra teatral "Zeus" en el teatro romano de Mérida
      De izq. a dcha. imágenes de escena de The Seven Streams of the River Ōta, Performs Tom Waits, Nigamon/Tunai y Journée de noces chez les Cromagnons
      Dolores
      Imagen de archivo de la Fira Marinera
  • Anuarios
  • Revistas en papel
  • Boletines
  • Suscríbete
  • Inicio
    • Belen Rueda 7
      Imagen de un momento del show
      Silvia Acosta en una escena de 'La dama duende'
      Faun(e) by David Dawson
    • María Fernanda D'Ocón
      Imagen de la actriz dando la bienvenida al público con su mítico "Gracias por venir" en la revista El último tranvía
      Momento del ensayo de 'Remanso' con Nacho Duato
      Diversas mujeres - Compañía Vertebradas Artes Escénicas
    • Últimas noticias

      Michael Ferreri
      Imagen de escena de 'Afanador'
      Imagen promocional de la obra
      Fotografía de escena

      Lo más visto

      Emma Ozores en una escena de la obra teatral "Zeus" en el teatro romano de Mérida
      De izq. a dcha. imágenes de escena de The Seven Streams of the River Ōta, Performs Tom Waits, Nigamon/Tunai y Journée de noces chez les Cromagnons
      Dolores
      Imagen de archivo de la Fira Marinera
  • Anuarios
  • Revistas en papel
  • Boletines
  • Suscríbete
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Año VIIINúmero 373
13 OCTUBRE 2024

«Los Figurantes» llegan al Teatro Reina Victoria de Madrid

TZ Marina 2024 1024x250

¿Qué sucedería si de repente los figurantes de una obra decidieran interrumpir la representación?  Algo inaudito está a punto de suceder en el interior de un gran teatro. La mecha de la revolución ha prendido entre bastidores y, a pocos minutos de que se levante el telón, los figurantes encierran a los actores principales en los camerinos y se presentan  ante el público como los nuevos protagonistas de la representación.  En su afán por igualar los méritos de sus opresores, estos dieciocho figurantes comenten todo tipo de disparates y extravagancias.  Por si esto fuera poco, un sorprendente descubrimiento nos trasladará desde lo que parecía ser una confortable comedia hacia una inmejorable oportunidad para reflexionar sobre las paradojas de la libertad individual y colectiva. ¿Lograrán acabar con los privilegios de los protagonistas? 

Los Figurantes es una de las obras cumbre de José Sanchis Sinisterra, fue estrenada en el Centre Dramatic de la Generalitat Valenciana con Dirección de Carme Portacelli en Febrero de 1.989 y según explica el propio Sanchis, el germen de esta obra se remonta a la época en la que trabajaba junto a José Luis Gómez en la dramaturgia de “La vida es sueño” para el Teatro Español, un trabajo que le brindó una excelente oportunidad de meditar sobre el destino de aquellas figuras condenadas a “aguantar la lanza”. 

La obra llega en esta ocasión al Teatro Reina Victoria de Madrid el próximo día 15 de enero de 2023, y se atrincherará en sus tablas todos los domingos a las 20.30 horas.

 

El texto (una reflexión de José Sanchis Sinisterra)

¿Quiénes son esos seres anónimos y oscuros que el dramaturgo arroja displicentemente al ruedo de la acción? Sin molestarse siquiera en darles nombre, cifra ni voz – a veces sí, unos versos, una sigla ordinal, apenas cuerpo…- les hace deambular como aturdidos por la trama; bultos opacos, sombras que discurren junto a la incandescencia de los otros, los verdaderos hijos de su fantasía: los protagonistas. Entran y salen generalmente inertes, como pequeños meteoros arrastrados por el paso fulgurante de una cometa: eterno séquito, cortejo, compañía, comparsa noble o plebeya, cortesanos o pueblo… no importa: nada les redime de su exigua identidad, de su casi no ser. Tienen encomendadas casi siempre las tareas penosas, los gestos más ingratos y anodinos, incluso a veces los cometidos francamente sucios. Papeles desairados, si los hay, pues ¿qué mayor desaire sobre un escenario que pasar inadvertido, que ostentar la anonimia?

Su destino implacable es el olvido, pero no ya al final, cuando el telón se abate, sino desde casi su misma aparición, ya que su presencia no tiene más remedio que erigirse en la frontera de la ausencia. Presencia precaria y muchas veces plural -que no coral: vestigios degradados son de tan ilustre antecesor, el Coro-, en ocasiones hablan al unísono, gritan más bien, ya que las más de las veces su discurso no sobrepasa el vítor o la asombrada exclamación. Pero incluso este parco don de la palabra se les concede pocas veces: suelen conformarse con ser testigos mudos -y hasta sordos, si conviene- de las grandes acciones y razones que los otros, los verdaderos personajes, cometen y acometen en plena impunidad. ¡Qué de locuras, crímenes, proezas, sacrificios y fastos han debido de presenciar con impotencia estoica y casi estatuaria! Colocados, pues, arbitrariamente, en tan último grado de la existencia ficcional, ¿no gozarán por ello del primero en la escala de lo real? ¿No serán, acaso, el eslabón perdido en esa cadena que vincula -misteriosamente, es cierto- lo imaginario de la representación con la realidad que lo produce y sustenta? La desazón y la reflexión se desplazan, inevitablemente, hacia esos otros “figurantes” de la vida y de la Historia. Hacia esos seres anónimos, insignificantes, condenados a actuar de comparsas en los grandes dramas, comedias, tragedias y farsas que tejen y destejen el destino de los pueblos en el Teatro del mundo. Ocurre a veces, sin embargo, que los comparsas se rebelan. Esas figuras grises, desvaídas, casi sin rostro y con papel exiguo, deciden de repente parar la representación, revisar el reparto, cuestionarse la obra y plantearse el gran interrogante: ¿Qué hacer? No es una tarea fácil. Y el primer obstáculo lo constituye precisamente su insignificancia, ese casi-no-ser que hay que sacudirse para acceder al nombre propio, a la significancia, a la presencia, a la querencia, a la acción. Para, en definitiva, dejar de ser «fondo» y llegar a ser «figura»; figurar, al fin, sin seguir siendo mera figuración.

 

Noticias relacionadas
el aguafiestas 1
Imagen promocional de las actrices que componen el reparto
Adictos-Lola-Herrera-1
3-Culturas-Fotografia-2
Imagen promocional de la obra y de sus protagonistas
El-peligro-de-las-buenas-companias
Últimas noticias
Michael Ferreri
Imagen de escena de 'Afanador'
Imagen promocional de la obra
Fotografía de escena
Imagen de escena de la obra 'Las que gritan'
Eduardo Guerrero en 'Sombra efimera'