Guillermo García Calvo, director musical del coliseo, se encargará de la dirección musical y Amelia Ochandiano la dirección de escena
Los repartos que asumirán los diferentes roles estarán integrados por Saioa Hernández, Carmen Solís, Jorge de León, Javier Palacios, José Antonio López, Ángel Ódena, María Luisa Corbacho, Milagros Martín o Rubén Amoretti, entre otros
La escenografía está firmada por Ricardo Sánchez Cuerda, el vestuario es de Jesús Ruiz, la iluminación es de Juan Gómez Cornejo y la coreografía de Miguel Ángel Berna
La función del 5 de febrero será grabada por Radio Clásica de RNE y emitida en fechas próximas
El Teatro conmemora los 100 años del fallecimiento de Tomás Bretón, que con ‘La Dolores’ logró cumplir su sueño de componer una ópera puramente española
El intenso dramatismo de su libreto y la genialidad de la partitura redondean una ecuación casi perfecta en la que Guillermo García Calvo –director musical de la casa- se ocupa de la dirección musical, y Amelia Ochandiano de la escénica.
Como es habitual, el foso lo ocupará la Orquesta de la Comunidad de Madrid (Titular del Teatro), y el montaje cuenta, asimismo, con otros grandes nombres en su equipo artístico. La escenografía es de Ricardo Sánchez Cuerda, el vestuario de Jesús Ruiz, la iluminación de Juan Gómez Cornejo y Miguel Ángel Berna, icono contemporáneo del baile de la jota, tan importante en esta obra, es el responsable de la coreografía que a lo largo de la obra va dibujando la esencia misma de los sentidos, que son muchos y poderosos.
Serán, además, dos repartos los que cantarán la obra de Bretón, tan genial como complicada. No es muy corriente que el público encuentre unos repartos de primer orden y equilibrio absoluto como los que presenta el Teatro de la Zarzuela en esta Dolores, y que están integrados por las sopranos Saioa Hernández y Carmen Solís, los tenores Jorge de León y Javier Palacios, los barítonos José Antonio López y Ángel Ódena, la mezzosoprano María Luisa Corbacho, la soprano Milagros Martín, el bajo Rubén Amoretti, el bajo-barítono Ihor Voievodin, los tenores Javier Tomé y Santiago Vidal, el barítono Gerardo Bullón o el tenor Juan Noval Moro.
Los acompañará en el escenario el Coro Titular del Teatro de la Zarzuela y el Coro de Voces Blancas Sinan Kay, así como 17 bailarines-actores y tres acróbatas.
La función del domingo 5 de febrero será grabada por Radio Clásica de RNE y emitida en fechas próximas.
El gran ejemplo de la lírica española
‘La Dolores’ es, sin duda, el gran ejemplo de la lírica española. Estrenada en el Teatro de la Zarzuela hace más de 125 años, el camino del éxito de una ópera española como esta fue lento, pero seguro. Primero conquistó al público y la crítica de la Zarzuela en Madrid y luego triunfó en el Tívoli, en Barcelona, ciudad donde quedó como obra de repertorio en diferentes escenarios. Eso sí, hay que tener presente que solo un año antes el compositor se había hecho famoso en todo el país como compositor de zarzuela con un sainete lírico: ‘La verbena de la Paloma’.
Sin embargo, en esta ocasión Tomás Bretón llevó al público a contemplar y a vivir una historia de tema rural que ya había conquistado la escena española de la época: ‘La Dolores’ de Feliú y Codina; obra realista con unas muy fuertes dosis de dramatismo, que proporcionó a Bretón –quien se encargó de dar también forma al libreto– la oportunidad de pisar firme, cantando en castellano, los escenarios de los templos líricos del país hasta entonces reductos de los modelos europeos.
Guillermo García Calvo señala que ‘La Dolores’ “es posiblemente la ópera romántica española más importante, sin duda alguna a la altura de las mejores óperas europeas de finales del siglo XIX”.
Además de la famosísima Jota, Bretón compone un impresionante mural de personajes y emociones, con nada menos que cinco cantantes masculinos, algo inaudito en el repertorio, que luchan por el amor de la soprano protagonista. Es en la música donde Bretón nos lleva de la mano por esta historia.
Amelia Ochandiano, destaca por su parte la grandeza, la luz y la pasión que encierra ‘La Dolores’: «Es una grandísima ópera española. Una partitura brillante y apasionada con un libreto lleno de matices y juegos dramáticos». Eso dice la directora de escena, que también recalca que la historia de esta muchacha, de La Dolores, se muestra como un aparente juego frívolo, festivo e intrascendente «que hemos querido resaltar en nuestra propuesta escénica, pero con un fondo siniestro y cruel que es casi imposible que no acabe en tragedia si no fuera porque Dolores no va a ser presa fácil, y sobre todo porque contra los deseos de amar, ser amado y entregarse al otro en cuerpo y alma, es casi imposible luchar».
100 años sin Bretón
Se da el caso, además, de que en este año 2023 que ahora comienza se cumple el centenario del fallecimiento de Tomás Bretón (Salamanca, 1850-Madrid, 1923), y esta de ‘La Dolores’ es una magnífica ocasión para recordar y reivindicar el talento operístico de este compositor y excelente director de orquesta, que dirigió el Conservatorio de Madrid durante más de 20 años en pro de la modernización de la enseñanza musical, y cuya obsesión de por vida fue precisamente la de crear e instituir dentro y fuera de nuestras fronteras el sello de una ópera pura e incontestablemente española.