En el marco de nuestro 25º aniversario, el dramaturgo y actor americano Thaddeus Philips crea para La Abadía este espectáculo que mezcla lo teatral, la danza y la performance
El montaje nos invita a viajar a través de un dispositivo multidisciplinar, con una elaborada atmósfera audiovisual, llena de juegos escénicos
Lejos de recrearse en una propuesta apocalíptica, Thaddeus propone un enfoque catártico, impactante, esperanzador a la vez entretenido, inspirándose en textos como Homo Deus, de Yuval Noah Harari o La tierra inhabitable, de David Wallace-Wells
Todo ello contado de la mano de cuatro intérpretes: Silvia Acosta, Julio Cortázar, Kateryna Humenyuk y Almudena Ramos, que en un espacio dominado por un gran domo -una escenografía minimalista que recrea la Tierra como obra de arte- van interpretando sucesivos personajes, en una propuesta que ha reducido lo textual a su mínima expresión para que la propia imagen sea el mensaje y donde la coreografía se convierte en la verdadera protagonista.
Thaddeus Philips se encarga también, junto a Emilio Valenzuela, de la escenografía, quien a su vez firma las proyecciones. Paloma Parra hace el diseño de luces, Eleni Chaidemenaki, el vestuario, y Fernando Martínez-Careaga Gómez la música.
Antropoceno podrá verse en la Sala Juan de la Cruz del 20 de febrero al 29 de marzo.
La era del Antropoceno
Ya solo los negacionistas dudan de que la acción del hombre en la Tierra está modificando a gran velocidad y de manera irrevocable nuestro planeta. Aquellos que nos estudien dentro de miles de años encontrarán residuos químicos, partículas de aire contaminado y montañas de plástico.
Como resultado de lo anterior convivimos con el calentamiento global, la extinción masiva de especies y modificaciones geológicas… Tal es nuestro impacto sobre la Tierra que en 2008 una comisión internacional de científicos alertó de que el concepto clásico de crisis ambiental se había quedado obsoleto, para dar paso al estado de emergencia, inaugurando una nueva era global que trasciende el Holoceno para dar paso al Antropoceno (del griego “anthropos”, humano, y “cene”, nuevo o reciente), un nuevo prisma con el que evaluar, desde el punto de vista ecológico-político-económico-cultural, las consecuencias de un irresponsable modo de vida.
Intentando hacer una toma de conciencia de nuestras contradicciones a la hora de hacer frente a esta emergencia planetaria, Thaddeus Philips se sumerge en un proceso de creación escénica que bucea alrededor de una infinidad de preguntas: ¿Cómo será el mundo que dejaremos a nuestros hijos? ¿Cómo serán los hijos que habitarán ese mundo que tal vez ya no veremos? ¿Cuáles serán sus sueños? ¿Cómo será una Tierra inhabitable? ¿Cómo está modificando la era del Big Data las relaciones humanas? ¿Dónde estaba el ser humano antes de la era del Antropoceno? ¿Hacia dónde nos dirigimos? ¿Hay lugar para la esperanza?
“Podemos gestionar la realidad para asegurar la supervivencia de la especie humana y del Planeta o podemos autodestruirnos”, valora el artista, a cuyo juicio es necesario “un nuevo salto en la evolución humana. Ya no deslumbrados por estar dotados de una poderosa herramienta, la razón -ese fuego robado de los dioses por Prometeo-: debemos deslumbrar por responsabilizarnos de ella y usarla con sabiduría”.
Lo que nos cuentan
Antropoceno, un trabajo de creación colectiva, nace como una fábula visual, arropada por una elaborada atmósfera audiovisual y sonora, que mezcla lo teatral, la danza y la performance. Con ello se vertebra una narración que se asienta en tres momentos de la historia del ser humano (1945 – 2020 – 2097), y en un puñado de personajes: Gerardo, un contable que trabaja junto a Robert Oppenheimer en la creación de la bomba atómica y se refugia en el alcohol ahora que su mujer lo ha abandonado; Ana, una científica que prepara una charla TED sobre el Antropoceno y no es capaz de fagotizar su preocupación por el futuro; y Katia una cazadora-recolectora que sobrevive como puede en el desierto de Monegros, y nunca ha tenido contacto con ningún ser humano. También pasan por aquí el propio Oppenheimer, Greta Thunberg o Silvi, una voz de inteligencia artificial.
Lejos de recrearse en una propuesta apocalíptica, Thaddeus propone un enfoque catártico, impactante, esperanzador a la vez entretenido, inspirándose en textos como Homo Deus, de Yuval Noah Harari o La tierra inhabitable, de David Wallace-Wells; en las ideas del arquitecto Richard Buckminster Fuller, o en las figuras reales de Robert Oppenheimer, uno de los pioneros en energía atómica, o la activista Greta Thunberg.
El por qué
Antropoceno nace de la necesidad de compartir desde la escena cuestiones que nos preocupan y nos interpelan como sociedad. Además de todas las materias referidas a la emergencia climática (salud pública, migraciones, conflictos político-sociales, producción de alimentos, la insalubre vida urbana y la diezmada vida rural…) la obra nos acerca a un momento, nuestro momento, en el que la multi-pantalla, la soledad y la toma de conciencia se erigen en protagonistas.
¿Hasta dónde nos va a llevar el desarrollo tecnológico? ¿Qué uso hacemos de las redes sociales? ¿Qué uso hacen los demás de nuestros datos? ¿Estamos anestesiados?
“Algún día, quizá dentro de no mucho tiempo, los habitantes de un planeta más caliente, más peligroso y biológicamente más mermado que este en el que he vivido, se preguntarán en qué estaríamos pensando usted y yo, o si en realidad pensábamos en algo.” Carbon Ideologies – VoIume I: No Immediate Danger, de William T. Vollmann.
Thaddeus Philips
Es el primer espectáculo que realiza en España Phillips, un hombre de teatro que derrocha imaginación y colaboró como actor con Robert Lepage en el espectáculo La geometría de los milagros. El artista ha paseado ya por escenarios de España (además de en Colombia, Costa Rica, Eslovenia, Italia, Países Bajos, Reino Unido o Serbia) varios montajes propios como director y actor, por ejemplo El conquistador (Festival de Otoño 2007), 17 fronteras (Vitoria y Zaragoza, entre otros) o Ankomsten (Avistamiento), un trabajo sin palabras que realizó de la mano de la compañía sueca Teateri, a partir del libro Emigrantes de Shaun Tan sobre la inmigración, y que acogió en junio de 2018 el Teatro de La Abadía.