En total se han programado 144 funciones, 18 adicionales respecto a las previstas inicialmente, y se han agotado completamente las entradas de 65 de ellas
Temporada Alta ha vuelto a posicionarse como un espacio de exhibición de las propuestas más interesantes de la escena internacional, con 16 espectáculos procedentes de 13 países, y ha participado en la internacionalización de algunos proyectos
16 de las 22 producciones propias o coproducciones presentadas en la 34.ª edición tienen garantizada gira o temporada en teatros catalanes, españoles o del extranjero tras su paso por Girona
7.459 personas se han beneficiado de los programas sociales y educativos del festival y 4.154 estudiantes de 52 centros han participado en las 85 actividades organizadas en el marco de A Tempo, Artes y Formación
En total, el festival ha recibido 52.993 espectadores, entre espectadores de sala (46.909), participantes en el proyecto A Tempo (4.533) y asistentes a actividades complementarias (1.551). Además, cabe destacar que, entre las 144 funciones de los 91 espectáculos, se ha alcanzado un 90,79 % de ocupación, y 33 espectáculos han agotado las entradas en todas o en algunas de sus funciones.
El apoyo a la creación ha sido uno de los pilares más destacados de la edición, en la que se han presentado producciones impulsadas directamente por el festival como Ai! La misèria ens farà feliços, de Gabriel Calderón, estrenada con gran éxito en Temporada Alta y actualmente en temporada en el Teatre Lliure, o la nueva creación de Angélica Liddell, SEPPUKU. EL FUNERAL DE MISHIMA o el placer de morir, que apunta a un largo recorrido dentro y fuera del país. Junto a estas grandes producciones, el festival ha acompañado también propuestas más modestas que han iniciado su camino en Girona, como ABECEDARI, de La Moukhles & Sentís, que consolida a artistas jóvenes; Cèl·lula #6: Faula, de Roser López Espinosa; o Bach – Dostoievski – Messiaen, con Lluís Homar y el Piano Duo Brugalla & Stambolov.
En el ámbito internacional, Temporada Alta ha mantenido su apuesta por combinar grandes nombres de la escena europea con voces contemporáneas consolidadas y nuevos creadores que se incorporaban por primera vez al festival. Junto a maestros y compañías de prestigio como Thomas Ostermeier, Christoph Marthaler o Cirque Éloize, el festival ha presentado a artistas como Romina Paula, Marina Otero, Conchi León, Jimena Márquez, Miet Warlop o el Collectif Bilaka, reafirmando a Temporada Alta como una ventana privilegiada a la escena internacional.
Uno de los puntos más fuertes de la edición ha sido, una vez más, el Big Bang, el fin de semana profesional del festival, que este año ha reunido a 106 profesionales internacionales en Girona y Salt. Este encuentro ha reforzado el papel de Temporada Alta como plataforma de internacionalización, con conversaciones ya en marcha para que espectáculos como Gola, Cèl·lula #6: Faula o Manual para seres vivos puedan tener recorrido en circuitos internacionales. Este impulso se ve reforzado también por la participación del festival en redes como Pyrenart II o Prospero New, que han permitido y permitirán giras y oportunidades concretas para compañías del país.
En cuanto a la programación más cercana, el festival ha vuelto a ofrecer una muestra amplia y diversa del panorama escénico catalán, con montajes como La mort i la primavera, de La Veronal; Dones de ràdio, de Cristina Clemente y Sergi Belbel; La brama del cérvol, de La Calòrica; o Avui no ploraré, de T de Teatre, entre muchos otros.
Este año, además, se ha puesto el foco en una línea de programación muy concreta: espectáculos creados por artistas menores de 35 años que comparten una mirada generacional propia y una manera particular de entender el mundo. Bajo la etiqueta Talento Joven, han pasado por el festival creadoras y creadores como Bàrbara Mestanza, Miquel Mas Fiol, Pau Coya o Elaine Grayling, a quienes el festival quiere seguir de cerca, aun tratándose de propuestas que requieren un mayor esfuerzo para acercar al público.

Internacionalización y creación contemporánea
Con una clara vocación nacional e internacional, la presente edición del festival ha destacado por una programación que ha mostrado al país lo que sucede a nivel internacional –con dos focos muy definidos como son la escena europea y la iberoamericana–, al tiempo que ha ayudado a las compañías locales a encontrar vías de acceso a la escena más allá de nuestras fronteras.
En total se han programado 16 propuestas procedentes de 13 países, entre las que han destacado Thomas Ostermeier con Hamlet, Christoph Marthaler con Le Sommet o Miet Warlop con Inhale Delirium Exhale. A estos nombres se suman también The Hague, una propuesta escrita por Sasha Denisova y dirigida por Galin Stoev, así como el espectáculo del Cirque Éloize, ID EVOLUTION.
El festival ha dado un nuevo impulso al espacio de exhibición y descubrimiento de propuestas de creación contemporánea, Big Bang, el gran encuentro de programadores que este año ha celebrado su 15.ª edición. En esta ocasión ha reunido a 106 profesionales nacionales e internacionales (procedentes de 12 países distintos) y ha programado grandes nombres de la escena internacional —como Miet Warlop o Marina Otero— junto a creadores del país ya consolidados —Oriol Pla, Lorena Nogal, Agrupación Señor Serrano o Roser López Espinosa— y otros nombres emergentes que el festival considera llamados a marcar el futuro de la escena local y a dialogar con estructuras internacionales para definir proyectos de futuro, como La Mula.
Además, en el marco del Big Bang, el festival ha acogido el estreno del nuevo espectáculo de Angélica Liddell, SEPPUKU. EL FUNERAL DE MISHIMA o el placer de morir, un montaje representado de manera excepcional a las 5:45 h de la mañana, antes de la salida del sol, y que supone el tercer estreno absoluto de la artista en Temporada Alta en los últimos cuatro años.
Proyectos internacionales de las próximas ediciones
Temporada Alta participa desde hace muchos años en diversos proyectos internacionales con el objetivo de establecer nuevas líneas de cooperación con artistas, equipamientos e instituciones de todo el mundo. A lo largo del año, la actividad continúa y, más allá de las coproducciones internacionales, el festival trabaja en proyectos como Pyrenart II, la continuación de una primera edición dentro del programa de la Comisión Europea POCTEFA – Interreg, que facilita la colaboración y el intercambio artístico entre las instituciones situadas a ambos lados de la frontera política de los Pirineos.
En la edición de este año, el festival ha acogido diversas reuniones y sesiones de formación del proyecto y ha programado Gernika (Collectif Bilaka) y We: Nosaltres i els temps (Mal Pelo), dos espectáculos enmarcados dentro de esta iniciativa. En el caso de Mal Pelo, además, se ha organizado una gira conjunta entre varios socios del proyecto que ha llevado el espectáculo a ocho teatros de los lados norte y sur de los Pirineos.
Asimismo, a principios de 2025 se puso en marcha de forma oficial la plataforma Prospero New, de la que Temporada Alta forma parte junto a 19 socios de toda el área geográfica europea. El objetivo del proyecto es la internacionalización de compañías consolidadas en su país de origen pero que aún no lo están a nivel internacional. En concreto, cuatro espectáculos de la compañía cabosanroque han sido seleccionados por la red (No em va fer Joan Brossa, Dimonis, Flors i Viatges y El castor que plorava), y por tanto están ahora a disposición de todos los socios internacionales para ser programados con el apoyo de la plataforma. Lo mismo ha sucedido en una segunda fase con los espectáculos Gola, de Oriol Pla y Pau Matas, y Thauma, de la compañía La Mula.

Nueva edición de Temporada Alta en Latinoamérica
Tras trece ediciones, Temporada Alta en Iberoamérica es un proyecto pequeño pero bien consolidado que lleva a compañías nacionales a presentar propuestas catalanas al otro lado del Atlántico, contribuyendo a la difusión de la cultura catalana en el ámbito internacional. Esta decimocuarta edición de Temporada Alta en Latinoamérica, que tendrá lugar a principios de 2026, contará con un nuevo formato que se dará a conocer en las próximas semanas.
Coproducciones del Festival en Gira y apoyo a la creación
Temporada Alta continúa apostando firmemente por la producción y la coproducción, una de las líneas más importantes del festival, que contribuye a generar proyectos para compañías del país y del extranjero. En esta 34.ª edición, el festival ha programado 22 producciones propias o coproducciones, de las cuales 20 tienen garantizada gira o temporada en teatros tras su paso por Girona. Esto es posible gracias a la colaboración continuada con compañías, productoras y equipamientos de dentro y fuera del país.
Entre los espectáculos producidos o coproducidos por el festival que iniciarán gira destacan, entre otros, Ai! La misèria ens farà feliços, de Gabriel Calderón, coproducida con el Teatre Lliure y actualmente en temporada en el equipamiento barcelonés durante las fiestas de Navidad, así como montajes como Tallar-se el peu amb una motoserra, de Bàrbara Mestanza, y ABECEDARI, de La Moukhles & Sentís, que pasarán por la Sala Beckett de Barcelona a lo largo de esta temporada.
Muchas de las producciones de Temporada Alta no solo se presentan o giran inmediatamente después de su estreno en el festival, sino que continúan representándose años después de su estreno, como es el caso de proyectos firmados por Angélica Liddell, Oriol Pla y Pau Matas, Mal Pelo, Sergi López, La Calòrica, Romeo Castellucci, La Veronal y cabosanroque, entre otros.
Por decimoquinto año consecutivo, el festival ha producido también el Torneig de Dramatúrgia Catalana, que en esta edición ha proclamado ganador a Martí Torras Mayneris. El certamen ha contado asimismo con una versión para institutos, celebrada desde hace siete años en el marco del proyecto A Tempo – Artes y Formación, que en esta ocasión ha premiado al alumnado de la Escola Pia de Salt.
Un festival social y educativo
Con la voluntad de mantener el compromiso de Temporada Alta con el territorio y de vincular las artes escénicas con los colectivos con mayores dificultades de acceso, el festival ha seguido impulsando programas sociales y educativos a través del proyecto A Tempo – Artes y Formación.
En su novena edición, el proyecto impulsado por la Fundación La Ciutat Invisible, con el apoyo de la Fundación Banc Sabadell, ha continuado apostando por promover el valor educativo de las artes en las escuelas de Girona y Salt. Desde el inicio del curso, se han programado 85 espectáculos y talleres de teatro y danza con contenido educativo en los centros de Girona y Salt. En total, 4.154 estudiantes de todas las edades –educación infantil, primaria, educación especial, secundaria, bachillerato y ciclos formativos– han asistido a propuestas centradas en temáticas como la inclusión social, la presión social y el suicidio juvenil.
El componente social del festival se ha articulado principalmente a través del programa de entradas sociales gestionado por la Fundación La Ciutat Invisible, que ofrece entradas a precio cero a distintos colectivos. En concreto, se han distribuido 2.969 entradas (310 a precio 0, 224 entradas gratuitas para previas y 2.435 a precio reducido).
Espectadores y territorio
En cuanto al perfil de las personas que han comprado entradas para Temporada Alta, el 40% de los clientes repite respecto a la edición anterior y el 26% ya había asistido al festival en alguna ocasión. La edad del público se ha mantenido en cifras similares a las de los últimos años, situándose la media en 48 años. Un 13,90% de los clientes han sido menores de 30 años.
La apuesta de Temporada Alta por una programación nacional e internacional de referencia ha convertido el festival en una oportunidad única para ver artistas y creadores que no pueden verse en otros espacios de Cataluña. En concreto, en 2025, los espectadores procedentes de fuera de las comarcas gerundenses han representado el 24,95% del público total.
En esta edición, la programación se ha desplegado en un total de 26 escenarios repartidos en 8 municipios distintos. Torroella de Montgrí, Sant Gregori, Bescanó, Banyoles, Palafrugell y Figueres han sido las subsedes del festival que, junto con Salt y Girona, conforman el conjunto de municipios que han acogido programación.
El eje central de esta edición, no obstante, ha sido la voluntad de explorar e imaginar nuevos espacios dentro de Girona y Salt. En este sentido, destaca el proyecto Llibràlegs, que, con la complicidad de las Bibliotecas de Girona, ha permitido extender el festival a distintos barrios de la ciudad donde no necesariamente existen equipamientos teatrales. Estos nuevos espacios se suman a otras propuestas innovadoras, como el uso del vestíbulo del Auditori de Girona para la realización del espectáculo Hallscape, o la Plaça de la Llibertat de Salt, que ha acogido el montaje Serà un dia que durarà anys.
Retorno económico del festival
Desde hace años, Temporada Alta ha ido extendiéndose también físicamente más allá de su núcleo central en Girona y Salt para hacerse presente en otras ciudades de las comarcas gerundenses. Del total de 22 espacios en 8 poblaciones, cabe destacar asimismo que, de forma paralela al festival y junto con el Ajuntament de Barcelona y la Generalitat de Catalunya, se ha impulsado una iniciativa que, bajo el nombre Flaix de Tardor – BCN, ha presentado una programación internacional de primer nivel en la capital.
Durante las 12 semanas que ha durado Temporada Alta, 1.450 personas han trabajado para el festival con distintos grados de dedicación, incluyendo 231 trabajadores directos, 871 personas de los equipos técnicos y artísticos de las compañías y 348 proveedores. El festival tiene, además, una importante repercusión económica en otros sectores, especialmente en negocios del comercio y la hostelería, en equipamientos culturales no estrictamente teatrales y en otros ámbitos económicos. Asimismo, el festival ha gestionado directamente 1.300 pernoctaciones en habitaciones de hotel, a las que hay que añadir todas aquellas contratadas por las compañías por su cuenta, así como por los profesionales y el público desplazado desde fuera del territorio.
El balance económico provisional se cierra con un presupuesto de 3.512.798,57 €, distribuido de la siguiente manera: taquilla (938.610,02 €), patrocinio y otros recursos (826.130,70 €), Generalitat de Catalunya (800.000 €), Ajuntament de Girona (400.000 €), Diputació de Girona (265.000 €), Ministerio de Cultura–INAEM (250.000 €) y Ajuntament de Salt (33.057,85 €). Los porcentajes de ingresos se reparten del siguiente modo: 49% de aportación pública, 24% de patrocinio y otros recursos y 27% procedente de la venta de entradas.




