Un maduro político, exministro, aficionado a cantar, está a punto de ser juzgado con altas probabilidades de ir a prisión. Desde sus comienzos en el partido comunista, pasando por el socialismo hasta arribar a la derecha conservadora, han pasado cuarenta años. Cuarenta años compartidos con su mujer, alto cargo en diversas instancias de la política cultural, y con su hija Amanda, ferviente admiradora suya, militante y joven promesa en el partido. Rafael Velasco no se arrepiente de nada. Todo lo que ha hecho lo ha hecho porque había que hacerlo. Y no ha hecho nada que no hayan hecho otros muchos.
Basado en datos de una historia real, reciente y sonada, pero con toda la libertad de fabulación y sátira que el teatro siempre ha tenido, Iberian gangsters aprovecha este cóctel de amor, política, idealismo, ambición y música para poner en pie un thriller inquietante, verosímil, cercano y lleno de humor: una verdadera spanish musical gangster’s story.
Una historia capaz de enganchar al espectador y no soltarlo hasta el final. De meterlo en el viaje interior del protagonista y su familia. Un viaje realizado sin perder la compostura ni la capacidad de justificarse ante sí mismo y ante los suyos. Un viaje apasionante y, sin embargo, tan humano y tan cercano que el espectador, sin dejar de reír –e incluso de cantar–, puede llegar a preguntarse: ¿seguro que yo no haría lo mismo?
Las razones
El escenario puede brindar un lugar de reflexión y es un espejo muy útil a toda una sociedad. La corrupción política es un tema que necesita de toda la energía para ser estudiado, comprendido y contenido. Queremos aportar una visión cercana, humana, real y, a la vez, teñida de humor y sátira sobre esta problemática. Los políticos (tanto los honestos como los ligeros de cascos) no vienen de otro planeta: son nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestros padres, nuestros primos, nuestros conocidos. Son fruto de esta sociedad, igual que todos nosotros. Una visión, basada en casos reales, aunque construida desde la ficción, puede servirnos para, desde el humor, mirarnos a nosotros mismos a través de estos políticos nuestros, tan autoindulgentes. Quizás lo que veamos nos haga pensar, además de reír. Ese es nuestro objetivo.
Creemos además que en estas épocas de cambio –que algunos se atreven incluso a denominar como la segunda transición– no está de más mirar no solo al presente, si no al futuro y preguntarnos qué quieren y qué pueden hacer las nuevas generaciones de políticos que piden paso con insistencia.
Es desde este doble enfoque temporal, lo que ha pasado y lo que puede pasar, desde donde construimos el espectáculo. Y también hay un doble enfoque formal: por un lado, la visión naturalista y centrada en el conflicto humano, individual, de una hija con su padre; y por otro, la distancia satírica –y dolorosa– que aportan los momentos de ruptura durante las canciones.
El espectáculo podrá verse del 1 al 30 de Julio en el Pavón Teatro Kamikaze de Madrid. Consulta nuestra agenda.