"No bailamos porque sí. Bailamos para dotar de movimiento a un concepto, a una historia. Hacemos una danza que cuenta, que se compromete. Los jóvenes somos conscientes de todo lo que se está perdiendo, de lo que muere cuando mueren nuestros abuelos. Hemos crecido en la aceleración constante, en un mundo de tecnología abrumadora y hemos decidido no correr, poner en valor la tradición, el oficio, la artesanía y el detalle. Nacimos a finales de los años 90 y nuestro contexto social, económico y político es distinto al de otros artistas que se han dedicado a la danza española. El presente por fuerza impregna nuestro trabajo porque miramos con los ojos de nuestra generación. Una mirada que está también en la pluralidad de lenguajes: la raíz y la tradición de la danza española y el flamenco, pero también la danza contemporánea". Así se acercan Irene Tena y Albert Hernández, al frente de La Venidera, a NO, esperada coreografía que dirigen e interpretan y que se estrenará en el Centro Danza Matadero de Madrid los días 17 y 18 de octubre...