Ésta es la primera pieza de su compañía, la Fantástica Maravillosa, la cual trabaja con un equipo creativo íntegramente femenino, con una perspectiva feminista sobre los cuidados, la vejez y la comunidad.
Cristina se sitúa en una boda, ceremonia-rito de paso (aunque hoy en día quizás menos significativa que hace unos años), la cual inevitablemente nos sitúa en el ideario de «de por vida». También es un contexto festivo, en el que se celebra la comunidad desde la comunidad, se celebra una unión que teóricamente hará la comunidad más grande y más fuerte. ¿Qué ocurre cuando tres personajes jóvenes, femeninos, atravesados por todos los supuestos sobre sus roles sociales, ¿viven este rito como espectadoras? ¿Qué les ocurre cuando este alud de futuro las atropella?
Por encima de la música de verbena, de las risas y el ajetreo, flotan sus miedos. El miedo a envejecer solo, pero también a envejecer con alguien. Que los abuelos que cuidan ahora, algún día sean sus padres. Y el pánico de estar desperdiciando su juventud. Las entradas para Cristina se pueden conseguir en la web oficial del Teatro Micalet o en taquilla una hora antes de cada función.